
Bueno, en esta ocasión son piratas turcos a las órdenes de Salah Raïs que, ateniéndonos a la realidad histórica, perpetraron un duro ataque al pueblo costero de Benidorm en octubre de 1543. Los cristianos se encuentran en la playa de Levante esperando el tan temido ataque, que no los cogerá por sorpresa porque han sido prevenidos por el virrey de Valencia. Después de un breve parlamento por parte de los embajadores, y de unos juegos y torneos, los benidormenses repelen el ataque de los piratas, que huyen con sus galeras mar adentro. Este espectáculo se producirá el viernes 29, a las 8 de la tarde, en la playa de Levante, en sustitución de las tradicionales embajadas, una de Adrián Espí y otra de Manuel Palazón, que datan de principios de los noventa del siglo pasado. Como podemos observar, es un cambio sustancial de las Fiestas de Moros y Cristianos. Al día siguiente, sábado 30 de septiembre, tendrá lugar la entrada de los dos bandos, el cristiano y el musulmán, desfile que culminará en la Plaza del Ayuntamiento, donde se encuentra ubicado el castillo. Y el domingo, día 1, a las doce del mediodía, se leerá el Parlamento de paz que escribió Pere Maria Orts i Bosch en 1990, único en toda la Comunidad Valenciana. Terminado el parlamento, todos los festeros se aprestarán para la ofrenda floral a la Virgen del Sufragio, para lo cual, en formación, moros, cristianos y autoridades, desfilarán hacia la iglesia de San Jaime y Santa Ana, donde se celebrará una misa en torno a la una de la tarde. Al anochecer del domingo, los Moros y Cristianos se despiden con el tradicional desfile de carrozas. Desde aquí deseamos buenas fiestas a todos los que colaboran y al público en general.
Manuel Palazón